Un condensador ( también llamado Capacitor, por ser su nombre en ingles.) es un dispositivo capaz de almacenar energía.
Existen muchos tipos de condensadores según su fabricación y los materiales que los forman, pero nos centraremos en los más usuales:
Es uno de los tipos de condensador más empleado, pero no son adecuados para funcionar con corriente alterna.
Los condensadores electrolíticos de aluminio se construyen a partir de dos tiras de aluminio, una de las cuales está cubierta de una capa aislante de óxido, y un papel empapado en electrolito entre ellas.
La tira aislada por el óxido es el ánodo, mientras el líquido electrolito y la segunda tira actúan como cátodo. Esta pila se enrolla sobre sí misma, ajustada con dos conectores pin y se encaja en un cilindro de aluminio.
Es el tipo normal. Utiliza aluminio como conductor y su el electrolito es una disolución de ácido bórico.
Funciona bien a bajas frecuencias, pero presenta pérdidas grandes a frecuencias medias y altas.
Está formado por láminas delgadas de poliéster sobre las que se deposita aluminio, que forma las armaduras. Se apilan estas láminas y se conectan por los extremos.
Utiliza cerámicas de varios tipos para formar el dieléctrico. Existen diferentes tipos formados por una sola lámina de dieléctrico, pero también los hay formados por láminas apiladas.
Dependiendo del tipo, funcionan a distintas frecuencias, llegando hasta las microondas.